¡Por fin aparece “Senjutsu”, lo nuevo de Iron Maiden!

Con la salida de Blaze Bayley, el regreso de Bruce Dickinson y Adrian Smith (junto a Janick y Dave) a finales del siglo pasado les permitió una mayor libertad aún, y los “nuevos” seis hombres de Maiden han sacado a la superficie su influencia del rock progresivo más que nunca. Desde la reunión forjada con el acertado título de 2000, “Brave New World”, lo han buscado rutinariamente a través de piezas de siete, ocho y nueve minutos.

Para aquellos que aprecian el prog rock tanto como el metal, y que citamos “Seventh Son Of A Seventh Son” de 1988 entre los momentos definitorios de Maiden, esto fue algo muy bueno. Sin embargo, no se puede complacer a toda la gente todo el tiempo, y cuando Dickinson intervino por última vez con una epopeya de 18 minutos llamada ‘Empire Of The Clouds’, los seguidores atraídos hace décadas por la inmediatez económica de ‘The Trooper’, ‘Run To The Hills’ y ‘Flight Of Icarus’ podían ser dispensados por levantar los ojos al cielo.

Para aquellos que se encuentran en esta última categoría, pero que se interesaron por su extravagante y atípico primer vídeo, ‘The Writing On The Wall’, el nuevo álbum Senjutsu (traducido vagamente del japonés como “táctica y estrategia”) probablemente proporcionará más placer que “The Book Of Souls” de 2015.

“Senjutsu” es otro conjunto doble, de nuevo con una duración de más de 80 minutos, y ninguna de sus diez selecciones dura menos de cuatro minutos. El segundo disco consta de sólo cuatro temas, tres de los cuales (‘Death Of The Celts’, ‘The Parchment’ y ‘Hell On Earth’) duran más de 10, 12 y 11 minutos respectivamente. Es probable que hagan perder la cabeza a los fans del lado más progre de Maiden.

Los detractores que lamentan lo que consideran el estilo de producción desordenado de Kevin Shirley seguirán añorando al gran Martin ‘Headmaster’ Birch y su prístina claridad, aunque un gran número de puntos positivos superan con creces todos esos inconvenientes. La voz de Bruce Dickinson sigue siendo extraordinariamente buena, y cuando el álbum comienza con el tema ‘Senjutsu’, de ocho minutos de duración, con olas de tambores y guitarras entrelazadas, es difícil no maravillarse con el sentido de alcance de Iron Maiden.

Este es un álbum notable de una banda que todavía tiene mucho que decir y ofrecer. Su punto álgido, ‘Death Of The Celts’, una fructífera muestra de guitarra de más de 10 minutos para los Tres Amigos que podría ser el equivalente de Iron Maiden al célebre ‘Róisín Dubh (Black Rose)’ de Thin Lizzy: A Rock Legend, es poco menos que asombroso.

Fuentes: Loudersound/ironmaiden.com/Iron Maiden YouTube/RockAmerika


Current track